¿Sabías que entre el 0,5% y el 1% de los gatos adultos sufren algún problema relacionado con el tracto urinario debido a que no beben suficiente agua? Esto provoca que la cantidad de orina sea menor y más concentrada, lo que, a su vez, hace que los gatos sean más propensos, por ejemplo, a los cálculos en el tracto urinario que los humanos o los perros.
Estos cálculos engloban distintas dolencias y sabrás si tu gato tiene alguno de estos problemas si: orina con más frecuencia, tiene dificultades o dolor para hacerlo y si presenta sangre en la orina.
Estas pistas pueden ir acompañadas de lo que se llama una “obstrucción en la uretra” y esto puede ser un grave problema que podría incluso ser letal para tu gato.
Pero, ¿cómo evitar los problemas urinarios de los gatos?
Agua. Que tu gato beba agua es esencial para evitar este tipo de enfermedades. Por otra parte, la alimentación es fundamental, una dieta completa y equilibrada evita que tu michi tenga problemas urinarios. La orina debe tener un Ph concreto y el tipo de comida que come tu gato puede ayudar a mantenerlo. De esta forma disminuye el riesgo de formación de las llamadas “piedras” en el tracto urinario.
Arenero. También la forma, la ubicación y el nivel de limpieza de la caja de arena es clave para que tu gato haga pipí de forma regular. Su instinto le impide hacer sus necesidades en una caja que esté sucia: por eso debes tener muy en cuenta su limpieza diaria y un lavado profundo cada semana. Ten en cuenta que el lugar donde coloques la caja de arena es muy importante: no hará pipí cerca de su comida o cerca de donde duerme. Busca un lugar aislado y si tienes más de un gato, separa las cajas y coloca ambas en un lugar tranquilo.
Estrés. Y por último, el estrés es una de las causas relacionadas con las enfermedades de las vías urinarias. Los gatos aman la tranquilidad y no hay nada que les guste más que dormir en una zona de la casa sin molestias, sin “peligros”, donde puedan control de todo. Colocar una estantería elevada para que duerma es lo ideal.
Por lo general estas recomendaciones pueden ser suficientes para ayudar a mantener las vías urinarias de tu gato en buen estado. No obstante, si sospechas que tu gato puede tener algún tipo de problema urinario, acude al veterinario cuanto antes, ya que en casos más graves, es probable que tu veterinario le recete algún medicamento o incluso necesite un procedimiento invasivo.
Esperamos que tras este artículo tengas una idea más general de los problemas urinarios que puede sufrir tu gato y que hayas aprendido qué puedes hacer para prevenirlos: vigilar su alimentación, que beba mucha agua y garantizarles tranquilidad para que tengan todo bajo control.