Muchas mascotas sufren lo que se conoce como “ansiedad por separación”, que se traduce como un exceso del vínculo con el ser humano. Por esta razón es importante ir trabajando con ellas antes de la finalización del aislamiento o cuarentena para reducir al máximo el “hiperapego”.
La ansiedad por separación se manifestará cuando retomemos nuestra vida normal, cuando no estemos en casa. Qué pasa: las mascotas ladran en exceso, rompen cosas, rascan la puerta, aúllan, se lastiman y hacen sus necesidades en lugares inadecuados. ¿Pero qué hacer para evitar estas situaciones? Estando en cuarentena, cuando la mascota se aísle voluntariamente, convendría premiarla. Es decir, a las mascotas que son muy ansiosas hay que premiarlas para evitar que, el día de mañana, cuando estén solas, no pasen la barrera de ansiedad por separación y de lo que significa el hiperapego.
¿Es posible evitarles el dolor con el regreso a la vida normal?
No existe una fórmula mágica, pero sí hay alternativas que pueden empezar a practicarse desde ahora con el objetivo de suavizar la vuelta a la antigua rutina. Por ejemplo:
✓ Es importante que los dueños logren concretar una jornada que se parezca mucho a la que las mascotas tenían antes de que se dictasen la medida de aislamiento social.
✓ También, en lo posible, hay que respetar los horarios para sacarlos a pasear.
✓ Hay que respetar sus espacios y su propia soledad.
✓ Por último, crear un entorno de juegos de búsqueda de golosinas en determinados espacios de la casa, de esta manera, cuando volvamos al trabajo tengan algo que hacer.
Con disciplina y amor, y siguiendo y respetando todas las indicaciones establecidas para el correcto desarrollo del aislamiento preventivo, podemos lograr que nuestros perros y gatos disfruten de nuestra compañía sin que eso traiga aparejadas connotaciones negativas que podrían afectarlos cuando termine el confinamiento.